EL proceso de privatización, via concesión a particulares ,de los servicios portuarios en el paÌs, entrò tiempos atras a su etapa culminante. Fueron lanzadas las convocatorias para la licitación de las terminales de contenedores y de usos múltiples de las cuatro terminales portuarias más importantes del paìs : Tampico, Veracruz, Lázaro Cárdenas y Manzanillo, y posteriormente se hizo lo mismo en los puertos restantes, segú n
se declaró por el entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, Carlos Ruiz Sacristán.
http://www1.ucol.mx/hemeroteca/pdfs/200295.pdf
Contemplada desde sexenios pasados dentro de la estrategia para inyectar dinero fresco que permitiò la modernización del sistema portuario nacional, es hasta ahora que se empiezan a materializar los resultados de aquellos proyectos que está muy ligado al Tratado de Libre Comercio que nuestro pals suscribió con los Estados Unidos de Norteamérica y Canadá y que se puso en marcha el uno de enero de 1994.
Dotar a los puertos mexicanos de una infraestructura actualizada y competitiva, se volvió imperioso a la vista del TLC, puesto que las terminales maritimas juegan un papel vital en el intercambio comercial entre los distintos mercados integrados en bloques, ya que es la via más barata para el desplazamiento de diversidad de productos y mercaderías, con lo que se fortalece la economía nacional .
De tal suerte, los países que no pongan sus puertos a la altura de las nuevas circunstancias de apertura comercial, desaprovechan la oportunidad de acceder a equilibrar sus balances comerciales y aún a inclinarlas a su favor.
En el caso del puerto de Manzanillo, además de que ya cuenta con una infraestructura moderna que le fue dotada por el gobierno federal así como por empresas que habian venido instalando terminales en el recinto de San Pedrito, tiene también otra via colateral para respaldar el movimiento portuario, como es una
super carretera que enlaza con el centro del país, en tanto que el ramal ferroviario es objetode adecuaciones para mover mayores volúmenes de carga
.
Pero el aspecto más importante de todo el proceso de modernización portuaria lo constituye, sin duda, el laboral, puesto que al cambiar de manos el manejo de esos centros de trabajo se ha tenido que negociar con quienes históricamente se han ocupado de la carga y descarga de buques.
Hasta la fecha, la negociación se ha llevado de manera cordial y en términos favorables, primero con la empresa para estatal Servicios Portuarios y después con la Administración Portuaria Integral que sustituyó a aquella una vez que varias empresas privadas empezaron a tener concesiones en algunas áreas de servicios.
Esa buena negociación sedebe a que, por la parte laboral, la ha
dirigido Cecilio Lepe Bautista, secretario general de la Federación
Nacional de Trabajadores del Transporte y Maniobras Marítimas y
Terrestres que agrupa a diez sindicatos de otros tantos puertos del
país, incluido Manzanillo. Lepe Bautista, conocedor profundo del
tema laboral en lospuertos, ha logrado quese reconozca la antiguedad
de siete mil trabajadores portuarios que habrán de ser liquidados, dos
mildeellosen loque tocaa Manzanillo. Asimismo, que lostrabajadores
de base vayan a ser recontrátados por las empresas privadas que
obtengan las concesiones que serán licitadas.
La modernización portuaria no prosperaría si por una parte no
se respetara el derecho que asiste a los trabajadores, pero tampoco
si los gremios portuarios no pusieran su parte para llevar a efecto la
transición necesaria e impostergable por resultartan vitalcorno se ha
dicho.
En esa negociación se ha reconocido, evidentemente, que no
tiene objeto una modernización si ésta no se refleja en el bienestar
social .
El lograr poner a resguardo el interés de la clase laboral, ratifica
las cualidades políticas del líder de los trabajadores portuarios, Lepe
Bautista, quien ha reiterado la disposición del organismo laboral que
dirigea que se lleve a su fin la modernizacióndelsector portuario, pero
a condición de que no se ignoren ni se atropellen los derechos de los
trabajadores.
La madurez y la responsabilidad con que se ha llevado la
negociación para la concesión de los servicios portuarios, habla bien
de sus protagonistas, especialmente de la parte laboral que, al
contrario de lo que ocurre en otros sectores en los que se han
pretendido cambios, se ha comportado con mentalidad abierta y
receptiva a las necesidades que impone la modernización.
La armonía y lasbuenasrelaciones sondosfactoresqueinciden
para que haya avances. Y es en los puertos maritimos, por su
condición de enlaces comerciales con el mundo, donde más se
requiere un buen ambiente; en cambio, los puertos conflictivos son
rehuidos por los usuarios lo que significa dejar de captar recursos
económicos, lujo que no se puede dar nuestro pais sobre todo en los
tiempos actuales . Manzanillopues, gracias a los buenosoficios politicos del líder
de los trabajadores portuarios, así comode las autoridades del sector
y losempresarios, continuarácomo generador eficientede satisfactores
económicos no sólo para sus trabajadores, sino para la región y el
país.
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